Sellados ignífugos y sus tipologías
Es fundamental comprender que los sellados ignífugos representan una de las medidas de protección pasiva contra incendios más eficaces. Son cruciales para impedir el paso del fuego, los gases y los humos a través de la compartimentación de los sectores de incendio.
El sellado de instalaciones forma parte de las medidas de protección pasiva. Además, existen otros elementos como los cerramientos, que incrementan y refuerzan la resistencia ignífuga de la estructura de un edificio y facilitan una actuación segura de los equipos de extinción.
¿Qué son los sellados ignífugos?
Los sellados ignífugos son medidas destinadas a restaurar y mejorar la resistencia original al fuego de un elemento de compartimentación afectado por el paso de instalaciones o la presencia de juntas.
De esta forma, es esencial diferenciar entre el contenido, como mobiliario, máquinas, electrodomésticos, etc., y continente, donde abarcamos naves industriales y edificios, entre otros.
Mediante estas medidas de sellado ignífugo, es posible retardar la expansión de las llamas, los gases y el fuego hacia sectores anexos independientes. Así, los sellados ignífugos actúan como barreras críticas en la protección contra incendios.
Importancia de los sellados
Por otra parte, según el Código Técnico de la Edificación y el Reglamento de Seguridad contra Incendios en Establecimientos Industriales, las instalaciones de los sistemas que garantizan la estabilidad estructural son responsabilidad del promotor o constructor del edificio. Esto subraya la relevancia de los sellados ignífugos en el diseño y construcción de edificios seguros.
Encontramos diversas tipologías de instalaciones como, por ejemplo: agua sanitaria, electricidad y climatización, entre otras. Todas ellas pueden comprometer la seguridad del edificio y contribuir a la propagación del incendio. Del mismo modo, podemos encontrar discontinuidades como aperturas de ventilación o juntas de dilatación. Por lo tanto, el sellado adecuado debe estar avalado por ensayos realizados en laboratorios independientes y acreditados, ya que hay diferentes sistemas según las necesidades específicas.
En conclusión, los sellados ignífugos son esenciales para garantizar la seguridad contra incendios en cualquier tipo de edificación. Estas medidas ofrecen una protección pasiva efectiva contra la propagación del fuego, los gases y los humos, asegurando la integridad estructural y la seguridad de los ocupantes del edificio.
Tipos de sellados ignífugos
A continuación, te exponemos las tipologías de sellados resistentes al fuego que se utilizan en la sectorización de incendios:
- Sellado registrable: Consiste en la colocación de sacos intumescentes o ladrillos flexibles en los huecos con paso de instalaciones modificables. De hecho, se puede utilizar como solución temporal o permanente para sectorizar los pasos eléctricos entre sectores.
- Sellado fijo: Se apoya en el uso de cables sueltos, bandejas eléctricas, entre otros, a partir del sistema de panel de lana mineral con recubrimiento de masillas, resinas intumescentes, mortero y espuma, o pintura ablativa.
- Sellados con rejillas intumescentes: Adecuados para espacios que necesitan ventilación, puertas, cortafuegos o muros.
- Sellados de tubos metálicos: La colocación será en la zona perimetral con panel de lana de roca de alta densidad y silicona intumescente, que dilatará a una determinada temperatura, carbonizará y obstaculizará el paso de humos y fuego.
- Sellados de tuberías combustibles: Consiste en la incorporación externa de collarines intumescentes o envolturas dentro de la pared o forjado. Los diámetros de dichas tuberías son de entre unos 50 mm y 500 mm.
- Sellado de tuberías no combustibles: Suelen presentar mayores dilataciones, movimientos y vibración. Es por ello, que los materiales empleados deben ser estudiados en función de la flexibilidad necesaria.
Por otra parte, para las juntas de dilatación se deberá obstruir el paso del fuego y el humo a otros sectores con sistemas altamente flexibles y resistentes. Para ello podemos colocar una tira de panel de lana de roca de alta densidad y recubrir 20-30 mm de silicona intumescente.
Es muy importante saber que se debe comprobar el estado una vez finalizada la obra ya que, si existieran huecos, se ha de apostar por un sistema de sellado ignífugo de instalaciones como los especificados anteriormente. De esta forma, podremos reforzar la compartimentación y frenar la propagación del incendio.
La compartimentación de edificios
A continuación, explicamos brevemente lo que debes saber sobre la compartimentación de edificios.
La compartimentación de edificios, son espacios delimitados por paredes y techos de una determinada resistencia al fuego. Por lo que, evita la propagación del fuego de un sector hacia otros en un incendio.
Se suelen utilizar tabiques, mamparas, trasdosados, etc., con resistencia al fuego. Estos elementos establecen una barrera eficaz entre el fuego y los elementos a proteger.
Qué materiales utilizamos para los sellados ignífugos
Por último, para resumirte un poco los materiales que se usan en los sellados ignífugos, los detallamos:
- Pasta preparada para el sellado de pasos de cables.
- Masilla intumescente para huecos de pequeñas dimensiones, como juntas de dilatación.
- Rejillas intumescentes para ventilación de sectores.
- Sacos intumescentes para sellado de huecos en bandejas de cables
- Collarines para tuberías de PVC.
Desde Ignifugaciones Generales, esperamos haber vertido un poco de luz sobre los temas de los sellados ignífugos, la sectorización de incendios y la compartimentación de edificios. Recuerda que somos profesionales de la protección pasiva contra incendios con sedes en Girona y Barcelona.
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